¿Debo contarselo todo... ?

Sólo tú eres dueña de tu pasado, sólo te debes explicaciones a ti misma y a tus principios, nadie debe saber tu intimidad a menos que sea capaz de recibir con amor y respeto una perla de tu alma.

Cuando una mujer apuesta por una nueva relación de amor, siente, legítimamente que debe ser ella misma y no dejar de decir nada a su actual promesa de amor.Siente que ser honesta y transparente es la única manera de poder poner las semillas para una relación con futuro basada en la comunicación, la alegría y el bienestar de ambos. Y claro, es indispensable que todo esto exista.

Pero rápidamente viene a la cabeza un “mandato” que puede tener una voz muy crítica y que nos dice “cuéntaselo todo”. En este momento una se siente como una niñita que debe decirle a sus papás todo, porque la fantasía que ellos lo adivinen y se enojen es muy peligrosa. El temor a no ser ese ideal de transparencia que hemos creado, puede perturbar nuestra emoción y llevarnos a una suerte de “confesión” con el chico que salimos.

Creo que es fundamental que podamos ser concientes, muy concientes de este sentimiento de “culpa “ y esta necesidad de acusarnos con él, pues si esto es el móvil para decírselo, entonces vamos por mal camino.

Es necesario que sepas que solo tú eres dueña de tu pasado, que sólo le debes explicaciones a ti misma y a tus principios, y que ninguna persona debe saber tu intimidad a menos que LUEGO DE CONOCERLA a fondo puedas decir si esta persona es capaz de recibir una perla de tu alma, como puede ser alguna experiencia previa a él.Muchos hombres se sienten traicionados, fastidiados, y pueden descalificarte o agredirte, y esto termina siendo una suerte de Confesión – Penitencia que en si no te lleva a nada más que cumplir la profecía del maltrato hacia ti misma.

Cuando pienses en contarle “todo” a tu pareja tienes que pensar si se lo cuentas para calmar tus culpas y por otro lado si realmente LA PERSONA ES CAPAZ DE RECIBIR TU HISTORIA CON AMOR Y RESPETO. No sea que tú imaginas que él es de determinada manera, se lo dices y luego eres maltratada por ello. No basta con que se lo quieras contar, sino que es necesario que veas bien si él está en condiciones de recibir esa parte de tu vida.

¿Estás enamorada/o de algún compañero/a en tu trabajo?

Dentro de los espacios de trabajo surgen todo tipo de sentimientos y de afectividad; y la sexualidad no escapa a ello. La intimidad y lo cotidiano acompaña a las personas, por ello muchas veces el amor surge en este espacio.

En muchos centros de trabajo está prohibido involucrarse sentimentalmente entre compañeros, pero más allá de estas prohibiciones, surge el afecto y la necesidad de la cercanía entre las personas.

También puede pasar que esta intimidad se confunda con amor cuando en realidad lo que hay es amistad y alegría por compartir un tiempo en conjunto.

Lo importante es que si realmente hay amor, éste no se maneje en la clandestinidad porque si bien puede ser fuente de pasiones tempranas, esa clandestinidad no permite que la relación crezca y promueva el desarrollo de ambos.

Escrito por: Dra. Lupe Maestre – Confidencias.

El problema de los grupos en la adolescencia

Una de las principales quejas de los padres cuando sus hijos llegan a la adolescencia es que “solo les importa lo que sus amigas y amigos le dicen” y claro está la mayor preocupación es “que le dirán sobre sexo”.

La verdad es que el grupo de amigos, ocupa un lugar central en esta etapa y puede llegar a tener consecuencias definitivas en la conducta y vivencia del adolescente. Detengamos a entender un poco más esta situación.

El adolescente al llegar a esta etapa vuelve a preguntarse acerca de “quien es y para que está aquí”. Pregunta vieja, que se hizo cuando apenas tenía 5 años. Sólo que ahora debe responderla a la luz de un gran reto y una nueva pregunta: “quien soy yo para ellos, para los otros”. La imagen que los otros le devuelvan de alguna manera va configurando la identidad del adolescente y le va diciendo quien es y como es.

El grupo actúa como una “persona”, es decir tiene una o múltiples identificaciones, tienen sentimientos, tienen una filosofía de vida, tienen reglas, tienen temores, tienen códigos. Todo esto hace que el joven busque fervientemente ingresar y pertenecer a un grupo. De alguna manera el pertenecer a algo diferente a su familia ,le da la garantía de “poder tener una vida separada de sus padres”, separada de su entorno infantil.

Otro elemento importante es la relación que el adolescente va establecer con el líder. Este líder encarna la ley, pero no la ley de los padres necesariamente sino una ley propia en la que el grupo , el líder, dice que se hace y como se hace. Es por esto que vemos la fe ciega que muchos jovencitos tienen sobre la persona líder, que puede ser “la más popular, la mas, sexy, el más inteligente, el más malo...” Lo que importa es saber que el líder es un miembro que se le ha atribuido una función , la de recibir todo lo que los chicos necesitan que él encarne para ... poder separarse de su mundo infantil.

Quisiera hablar de un puntos más, y es el de la “susceptibilidad” que sienten los adolescentes cuando “criticamos” a algún amigo o miembro del grupo. Ellos reaccionan violentamente por que para ellos es un ataque directo a ellos mismos, a su autoestima que la han proyectado hasta los demás miembros de su grupo. Es como si sintieran que el ataque es a ellos y esto genera una furia marcada y una necesidad de “defenderlos”, a los amigos. Es preferible hablar con mucho cuidado de estas personas y tener en cuenta que el adolescente siente que están hablando de él .


El grupo actúa como el lugar donde su hijo y su hija va ensayar todo lo que aprendió en casa, pero refiriéndonos a como aprendió a amar, separarse, frustrare, esperar, agredir, defenderse, contenerse, ser generoso, tomar y recibir placer. Todas estas experiencia fundantes en el mundo emocional de un niño se dan dentro del grupo.

El grupo que elige un adolescente es de alguna manera una pequeña replica de lo que él sintió es su hogar. Y esto puede ser doloroso para algunos padres pero si miran bien dentro de estas dinámicas familiares podrán encontrar la respuesta de por que su hijo escogió ese y no otro grupo.